Dedos y papel
Aproveché esta idea para fusionar varias pasiones, la encuadernación, la fotografía ajena/personal y ensalzar lo que sea; En este caso instagram y el paso del tiempo.
Lo veo como un vestigio de lo que fueron mis "me gusta" de octubre 2018 a abril 2019. Esta red social me sirve como una dosis de creatividad e inspiración, de colores y encuadres, risas para adentro y de almacén infinito. ¿será infinito?
Pienso que todas esas imágenes, memes, texturas que me generaron tal asombro como para dar doble click y guardar en aquel almacén deberían tener un lugar más seguro, qué tal mi librero. Como siempre mi mente empieza a ir leeeeeejos sin mucho fundamento pero si mucha romantización.
Yo de abuela, mi pelo morado, café, tal vez galletas (bueno si, seguramente habrá galletas recién horneadas de limón) y algún nieto interesado mostrando lo que era "en aquella época" una red social de imágenes (que para este tiempo ya será anticuada y sin sentido porque estará más que enterrada). En ese momento dejé de ser abuela y me convertí en nieto interesado, uy! hasta se me pone chinita la piel solo de imaginar la joya pura que sería poder ver el mundo de mi abuela, las cosas que le hicieron dar doble click y poder con claridad de vestimenta, estética, gráficos, cinismo, arquitectura y movimientos sociales y políticos verla caminar y desarrollarse por esos cuadrados llenos de su realidad y tiempo, para entender un poco su pasado y compararlo con su cara arrugada y sus adornos de ahora.
Curiosidad me da pensar como sería el almacén de mi abuela, bisabuela y hasta de mi madre.
Dejando atrás la idea de reproducción romántica con galletas de limón y más enfocados en la realidad, este libro es para mi, para mi memoria olvidadiza que disfruta de la nitidez y claridad que casi nunca puedo ofrecerle y con este objeto le doy, cada vez que lo recuerde, claro. Volver a sentir esos asombros constantes dignos de almacenar pero de una forma menos tecnológica y más manual, dedos y papel, esos cuadrados llenos de mi tiempo en este cuerpo al que le gusta encuadernar y romantizar cualquier cosa que le pase por enfrente.
_Es encuadernación copta y la estampa de portada me la encontré abandonada en el suelo de mi escuela, estuvo guardada hasta que le encontré un propósito igual de lindo que ella.
Lo veo como un vestigio de lo que fueron mis "me gusta" de octubre 2018 a abril 2019. Esta red social me sirve como una dosis de creatividad e inspiración, de colores y encuadres, risas para adentro y de almacén infinito. ¿será infinito?
Pienso que todas esas imágenes, memes, texturas que me generaron tal asombro como para dar doble click y guardar en aquel almacén deberían tener un lugar más seguro, qué tal mi librero. Como siempre mi mente empieza a ir leeeeeejos sin mucho fundamento pero si mucha romantización.
Yo de abuela, mi pelo morado, café, tal vez galletas (bueno si, seguramente habrá galletas recién horneadas de limón) y algún nieto interesado mostrando lo que era "en aquella época" una red social de imágenes (que para este tiempo ya será anticuada y sin sentido porque estará más que enterrada). En ese momento dejé de ser abuela y me convertí en nieto interesado, uy! hasta se me pone chinita la piel solo de imaginar la joya pura que sería poder ver el mundo de mi abuela, las cosas que le hicieron dar doble click y poder con claridad de vestimenta, estética, gráficos, cinismo, arquitectura y movimientos sociales y políticos verla caminar y desarrollarse por esos cuadrados llenos de su realidad y tiempo, para entender un poco su pasado y compararlo con su cara arrugada y sus adornos de ahora.
Curiosidad me da pensar como sería el almacén de mi abuela, bisabuela y hasta de mi madre.
Dejando atrás la idea de reproducción romántica con galletas de limón y más enfocados en la realidad, este libro es para mi, para mi memoria olvidadiza que disfruta de la nitidez y claridad que casi nunca puedo ofrecerle y con este objeto le doy, cada vez que lo recuerde, claro. Volver a sentir esos asombros constantes dignos de almacenar pero de una forma menos tecnológica y más manual, dedos y papel, esos cuadrados llenos de mi tiempo en este cuerpo al que le gusta encuadernar y romantizar cualquier cosa que le pase por enfrente.
_Es encuadernación copta y la estampa de portada me la encontré abandonada en el suelo de mi escuela, estuvo guardada hasta que le encontré un propósito igual de lindo que ella.
Comentarios
Publicar un comentario